Si lo puedes soñar, lo puedes lograr

Walt Disney

¿Qué es lo que nos mueve a seguir, frecuentar o hasta imitar a algunas personas o grupos?
Que nos inspiran algo.
Estamos en un momento crítico para el país, las cifras las conocemos todos. Pero aunque no se quiera reconocer, el proceso de adoctrinamiento que ha llevado a cabo el aparato propagandístico de la cuatroté ha funcionado de ambos lados: a favor y en contra.
Sí, la oposición (política o ciudadana) se siente muy orgullosa de no haber caído en “las mentiras” y el adoctrinamiento. Pero esto no es del todo verdad. Al final, nadie duda de las acusaciones que durante años Andrés hizo SIN pruebas.
Hay dentro de la oposición muchas personas que juran que Felipe Calderón hizo un fraude electoral que jamás se probó (requisito para volverse una verdad jurídica). Existen sólo acusaciones y videos de “la entrega de pruebas”, que no fue más que una simulación: cajas vacías.
También se le ha comprado un sin fin de hechos que no tienen sustento legal (pruebas), pero que de tanto repetirlos se convirtieron en verdad.
Tal vez la peor mentira que le hemos creído es que no existe una oposición o que está moralmente derrotada. Porque repetirlo pareciera tan políticamente correcto como repetir las consignas del régimen.
La oposición política está limitada por los votantes, fuimos los ciudadanos los que les quitamos el poder. Lo hicimos no votando por ellos. ¿Cómo voy a votar por el PRIAN? Como si votar por ellos fuera una traición a la patria, un dogma que viene del mismo lugar del que viene el fanatismo del “otro bando”.
El juego propagandístico fue para los dos bandos: ganando adeptos y descalificando a los posibles opositores.
Pareciera que no se entiende que hoy es exactamente igual apoyar a Morena que no apoyar a nadie, ambos son producto del adoctrinamiento.

¿Estoy defendiendo a los partidos?

No, me queda más que claro lo que son. Pero también me queda claro que en ningún caso generalizar es justo y esta no es la excepción. Mientras que existen miembros de los partidos que han jugado más a favor de Morena que de la oposición, también están los que han dado batalla en las cámaras. Los que han dialogado con la ciudadanía y están tratando de promover un cambio con propuestas.
A estas alturas ya sabemos que una parte de la población no va a cambiar fácilmente su adoración por una persona, pero hay muchos que sí están abiertos. A ellos los tenemos que motivar, que INSPIRAR y el primer paso es creer que lo podemos hacer. ¿Qué nos lo impide? El adoctrinamiento.
Llevamos ya tres años escuchando frases como: oposición pedorra o moralmente derrotados que se repite sin cesar con la única intención de lograr que se instaure en nuestros cerebros como una verdad incuestionable. El aparato propagandístico de la 4T nos ha invadido las neuronas con un derrotismo que impide que demos el primer paso: creer que es posible.
Nadie logra INSPIRAR y contagiar a otros si primero no está convencido de que lo puede lograr.
Yo sí lo estoy ¿y tú?